Tránsitos: Reconstrucción emocional. 

25.06.2021

¿Qué se está moviendo con esta luna llena en Capricornio y este Sol y Venus en Cáncer?


Cada plenilunio nos invita a cerrar un ciclo o a reflexionar sobre un tema, que nos atañe de hace 6 meses atrás. A replantearnos una situación, una conducta, una etapa que, de algún modo, debemos soltar. Indica una experiencia ya concluida. Y tras integrar ese proceso de cierre, estamos listos para crear cosas nuevas de manera coherente con lo que nuestra evolución reclama en este momento. Durante estos meses hemos trabajado en una reconstrucción personal y ahora llegan los frutos. Pero para que entren cosas nuevas en nuestra vida, debemos hacer espacio y soltar aquellas que ya no necesitamos, que ya han cumplido su cometido en nuestro proceso. Ya estamos preparados para continuar nuestro camino sin esas muletas.

Estos días tenemos la Luna (mundo emocional, niño interior, nutrición, cuidados) en Capricornio. La Luna manifestada desde la energía de este signo nos lleva a ser responsables, comprometidos, a afrontar miedos y obstáculos, para cumplir nuestras metas en el mundo emocional. A dar sentido y estructura, a construir unas relaciones que nos nutran, empezando por la propia.

El Sol está en Cáncer, poniendo foco precisamente en estos temas emocionales, ayudándonos a atender y entender nuestras necesidades con mayor claridad. Es momento de abrazar a nuestro niñx heridx y proporcionarle un hogar, un lugar donde se sienta como en casa, arropadx y cuidadx. Sol en Cáncer busca relaciones afectivas que le aporten estabilidad emocional, un lugar seguro donde poder dar y recibir cariño. 

Por otra parte, hay varios aspectos armónicos que nos van a ayudar a conectar con nuestras emociones y a atenderlas, desde el sentir, desde la intuición, suavizando la frialdad, la contención y la racionalidad de Capricornio.

Principalmente tenemos a Júpiter en Piscis, que nos invita a expandirnos a nivel emocional y espiritual, ayudándonos a tener relaciones más conscientes, más profundas, a conectar con nuestro Ser Superior al fusionarnos con el otro desde la apertura y la entrega. También nos permite vivirlo con la ilusión de un niño que está descubriendo un mundo mágico. 

A su vez, tenemos a Venus en Cáncer que nos va a conectar con una necesidad de amor, de dar y recibir cuidados. Venus en este signo se encuentra muy cómodo, es una posición que realza las cualidades afectivas de Venus, permitiendo que su energía se manifieste en todo su esplendor. Además, está haciendo aspectos armónicos con Neptuno y con la Luna, dos planetas de energía femenina y cuidadora, con anhelos de fusión emocional, de ensoñación. 


Marte en Leo nos impulsa a mostrarnos, a crear cosas nuevas, proyectos, relaciones, a retomar hobbies, a hacer deporte, a tener sexo. Despierta nuestra energía sexual creadora, nos llena de vitalidad. Nos hace sentirnos conquistadores y alimenta nuestro ego en esta necesidad de ser vistos, de compartir con el mundo todo nuestro brillo.

Mercurio deja de retrogradar en geminis, así que todo ese ruido mental confuso, cambiante y ambiguo que nos venía acompañado va a cesar, permitiéndonos fluir y disfrutar de los aprendizajes que la vida nos trae. 

Y como aspectos tensos, pero necesarios para nuestra evolución, mencionar que Plutón está en Capricornio haciendo oposición a Venus en Cáncer. Es decir, vamos a sentir un apego y una necesidad de control por nuestra integridad. Vamos a notar mucha resistencia a soltar nuestras corazas y bloqueos. Lo cual hará que la conexión afectiva que nos pide Venus, suponga un proceso de muerte y transformación, que nos llevará a vivir la entrega emocional con miedo, como una pérdida de "poder", pues pone en evidencia todas esas sombras que no son cómodas de transitar.

Y por último hablar de otro aspecto tenso/evolutivo: Marte y su cuadratura con Urano en Tauro. Esto implica, que la autoimagen que tenemos de persona, única, original, libre y excéntrica, se verá afectada, pues Marte en Leo nos recuerda que por más transgresores, revolucionarios y genuinos que nos creamos, es la búsqueda de la valoración externa lo que nos moviliza para sacar todo nuestro potencial, nuestra luz. Nuestro propósito es compartirla. La energía de Leo, bien expresada, se asocia al corazón y a la generosidad y no tanto al ego. Habla de una necesidad de mostrarnos porque somos conscientes de nuestro valor, confiamos en nosotros y en nuestro corazón y, desde ahí, nace la necesidad de compartir con amor y generosidad y seguridad.


Espero que esta explicación te haya ayudado a comprender la energía que predomina estos días. 

Si te resuena y quieres profundizar en la astrología psicológica como herramienta de autoconocimiento y crecimiento personal, puedes contactarme para conocer todos los detalles de tu carta natal y aprender a utilizarla como el mapa evolutivo que es. 

¡Un abrazo y mucho amor!